Guerra al uso del teléfono móvil al volante

Rebeca Iturmendi. El Fiscal de Sala Coordinador de Seguridad Vial, Bartolomé Vargas, ha publicado una nota de prensa dirigida a todas las Policías del territorio nacional con el objetivo de reforzar el respeto de las normas y disminuir el sentimiento de impunidad de los conductores ante el uso del teléfono móvil al volante. Esta acción, se traduce en un factor más que significativo de siniestralidad en la carretera.

El fiscal insta a la Policía para la efectiva aplicación de la Ley Penal en los delitos viales de peligro a cuyo tratamiento suma, además de los excesos de velocidad y la conducción bajo la influencia del alcohol y/o las drogas, el uso de teléfonos móviles u otros dispositivos al volante.

Atendiendo a las cifras de siniestralidad, la velocidad está presente en el 30% de los accidentes y el 42% de los fallecidos en accidentes presentaban consumos de alcohol, drogas u otras sustancias psicotrópicas. Según palabras del Fiscal, más allá de su finalidad sancionadora, los controles de tráfico constituyen un mecanismo de prevención que tiene por objeto interceptar dichas conductas y evitar riesgos inminentes para uno mismo y para terceros.

El uso del teléfono móvil al volante se trata de una conducta considerada como imprudencia grave, que puede conllevar la investigación de los actos de comunicación simultáneos o inmediatamente anteriores en caso de accidente y que, en los casos de mayor gravedad, podría conllevar la aplicación de medidas cautelares privativas del derecho a conducir, incluso privativas o restrictivas de libertad.

Finalmente, dicha nota informativa condena la actitud normalizada en algunos ciudadanos de avisar a otros de la existencia de controles policiales, usar apps u otros medios para la detección de radares, inhibidores y otras herramientas tecnológicas, minorando o anulando así los esfuerzos realizados por las autoridades de tráfico a fin de proteger la vida y la integridad de las personas.