Cuando no te cubre el seguro… aunque lo tengas a todo riesgo

La cobertura del seguro de tu coche no es infinita. Tiene excepciones. Te contamos cuándo no te cubre el seguro… aunque lo tengas a todo riesgo.

Todos los vehículos deben tener un seguro de responsabilidad civil obligatorio, lo que se conoce como seguro a terceros. Básicamente cubre los daños que puedas hacer a otras personas. Pero lo normal es contratar una póliza de seguros con más coberturas que las básicas, un seguro a terceros ampliado o un seguro a todo riesgo, con o sin franquicia en el que el conductor y el vehículo de éste estén cubiertos, aunque sea el culpable. Pero este seguro tiene excepciones. Te contamos varias situaciones en las que no te cubre el seguro… aunque lo tengas a todo riesgo.

Antes de continuar conviene tener claro que nuestra aseguradora siempre va a cubrir los daños (personales y materiales) que ocasionemos a terceros, cuando seamos nosotros culpables. Ahora bien, en algunos casos, a pesar de tener contratado un seguro a todo riesgo nos reclamará el dinero abonado.

No haber pasado la ITV

Por lo general las compañías de seguros no te cubrirán si sufres un siniestro siendo culpable si tienes la ITV caducada. La aseguradora puede argumentar que el hecho de que el coche no circule con las garantías adecuadas ha sido causa directa o indirecta del accidente.

Ahora bien, en el caso de no ser culpable, dependiendo de las pólizas, podrás mantener el derecho a ser indemnizado. Eso sí, recibirás la correspondiente multa de 200 euros por circular sin ITV.

Conducir bajo los efectos del alcohol o las drogas

La compañía de seguros se negará a cubrir los daños propios en caso de sufrir un siniestro y conducir con una tasa de alcohol superior a la permitida o bajo los efectos de las drogas, estupefacientes o sustancias psicotrópicas. Como decimos, los daños que ocasionemos a terceros serán abonados por la compañía que luego nos repercutirá.

Más ocupantes de los permitidos

En caso de llevar en el coche más ocupantes de los permitidos y sufrir un accidente, la compañía podrá negarse a indemnizarnos, aunque tengamos la cobertura de seguro a todo riesgo. También ocurre si excedemos el peso máximo autorizado o la medida de los objetos transportados.

Conductor novel al volante sin declararlo

Muchas compañías te pondrán problemas para cubrir los daños en caso de accidente si el conductor es menor de cierta edad o tiene poca experiencia al volante y no lo has declarado al seguro como conductor. Esto ocurre cuando los padres le dejan el coche a los hijos sin declararlo para ahorrarse el sobrecoste que esto supone. Si estamos cubiertos o no dependerá de la póliza.

Combustible equivocado

Ninguna compañía de seguros cubre el coste económico de una avería producida por equivocarnos a la hora de repostar. Lo consideran una negligencia cometida por el propio conductor. En todos los casos, sí que cubrirían el servicio de grúa del traslado del coche averiado al taller.

Omisión del deber de socorro

Si el conductor asegurado es condenado como autor del delito de omisión de socorro la compañía puede negarse a cubrir los daños. Imaginemos un conductor que ha atropellado a alguien y le abandona sin socorrerle.

Daños causados intencionadamente

Como en el resto de seguros, los daños causados intencionadamente, bien con el vehículo o bien con el vehículo no están cubiertos por la aseguradora.

Conductor sin carné

La compañía aseguradora puede negarse a cubrir los daños ocasionados por conductores sin permiso o con este retirado. Ojo si tienes el carné caducado. Te ocurrirá lo mismo.

Daños en caso de robo

Según la Ley sobre responsabilidad civil y seguro en la circulación de vehículos a motor «quedan excluidos de la cobertura de los daños personales y materiales por el seguro de suscripción obligatoria quienes sufrieran daños con motivo de la circulación del vehículo causante, si hubiera sido robado».