Cómo cargar la batería de un vehículo eléctrico correctamente

ALD Automotive expone una serie de recomendaciones básicas para cuidar los vehículos con motorización eléctrica de forma eficiente y óptima y contribuyendo a alargar la vida útil de la batería.

Las matriculaciones de eléctricos en renting no dejan de incrementarse. Solo a marzo de 2022 habían crecido ya un 43% en tasa interanual. Por supuesto, en el parque total de vehículos son cada vez más los conductores que apuestan por la electrificación y la movilidad cero emisiones. Por ello, ante el aumento de la circulación de vehículos con este tipo de motorizaciones, desde ALD Automotive exponen una serie de recomendaciones básicas para que los usuarios de estos automóviles sepan cómo cargar la batería de su coche de la forma más eficiente y óptima.

La mayor parte de las baterías están fabricadas de ion litio, por lo que es importante conocer cómo cuidarlas de manera correcta para extender su longevidad y aumentar su vida útil. En este sentido, la recarga del vehículo ha de hacerse cuando sea realmente necesario, y no siempre que tengamos el coche en el garaje, ya que hacerlo siempre reduciría la capacidad de la batería poco a poco.

De la misma manera que no es conveniente cargar la batería sin necesidad, tampoco lo es dejar que la batería se agote por completo. En concreto, el consejo estandarizado de las marcas es cargarlo cuando quede alrededor de un 20%. En relación a la carga máxima recomendada, algunos expertos recomiendan no sobrepasar el 80% de carga, aunque, por ejemplo, marcas como Tesla piden cargar las baterías al 100% una vez por semana.

Teniendo en cuenta todos estos parámetros, si el conductor va a estar un largo periodo de tiempo sin utilizar el vehículo eléctrico, es recomendable mantener la batería entre el 25% y el 75%, ya que, si la batería queda completamente llena o completamente vacía, se favorece la degradación prematura de la misma.

Por todo ello, desde ALD Automotive recuerdan además la importancia de conducir de una forma eficiente para optimizar el uso de la batería: una velocidad apropiada, una presión adecuada de los neumáticos, evitar el derroche de energía y el exceso de equipaje e, incluso, evitar las temperaturas extremas, contribuyen de forma decisiva al alargamiento de la vida útil de la batería.