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A partir del seis de julio, varios vehículos deberán llevar un alcoholímetro integrado. Estos vehículos serán los destinados al transporte de personas y mercancías peligrosas. El alcoholímetro evitará que estos vehículos arranquen si la tasa de alcohol supera la permitida.
Las cifras no mienten. Uno de cada cuatro accidentes mortales están provocados por el alcohol. En el año 2020 el 49% de los fallecidos en carretera dio positivo en alcohol o en drogas. El mensaje de no beber si vas a coger el coche no ha calado como querría la DGT, y todavía mucha gente sigue conduciendo bajo los efectos de este. Por ello, vehículos determinados llevarán integrado un alcoholímetro, denominado Alcolock.
Qué vehículos deberán llevar un alcoholímetro
Por ahora solo deberán llevar este dispositivo los vehículos destinados al transporte de personas o de mercancías peligrosas. La fecha fijada para que se instale esto es el seis de julio de 2022. Por ahora no afectará a los vehículos particulares, aunque no se descarta en un futuro, y para 2024 podría llegar a todos los vehículos.
Si bien es cierto que no todos deben llevarlo, si que es verdad que todos los nuevos vehículos deben llevar integrado un sistema para la posterior instalación del Alcolock.
Este sistema, por lo tanto, forma parte de los diez ADAS (Sistema Avanzado de Asistencia a la Conducción). Esto es lo que todos los vehículos de nueva fabricación deberán llevar integrado en el continente europeo. Por tanto, el Alcolock, se une a otros proyectos como el de la caja negra.
Está claro que la DGT quiere seguir trabajando para minimizar al máximo los accidentes. El alcohol es uno de los mayores enemigos de la seguridad en carretera. Con estos proyectos enfocados a la seguridad vial, se quiere evitar que por una imprudencia de un conductor se produzca una tragedia en carretera.
