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La industria automovilística española está de enhorabuena, después de que en las últimas semanas hayan sido varias las marcas del sector que hayan mostrado su apuesta por España para la fabricación de sus modelos.
Aprovechando la visita del presidente del Gobierno Mariano Rajoy a la planta de Figueruelas (Zaragoza), Opel ha anunciado que esas instalaciones acogerían en 2014 la producción del Mokka, el todocamino compacto de la firma alemana, que hasta ahora se fabricaba en exclusiva en Corea del Sur. La alta demanda de este modelo en Europa es la razón que ha llevado a Opel a trasladar la producción del Mokka a sus instalaciones en España, donde, hasta ahora, se venían produciendo los modelos Corsa y Meriva.
Además, Renault ha confirmado que será su planta de Villamuriel de Cerato, en Palencia, la que acogerá a partir de 2015 la producción de su nuevo todocamino. Se trata de un modelo desarrollado sobre la plataforma que comparten Renault y Nissan y que ahora emplean modelos como el Qashqai o el Koleos. Si bien el nuevo todocamino tendrá unas dimensiones similares a las del modelo japonés, su aspecto estará más cercano al del todocamino Captur que actualmente se fabrica en la factoría de Renault en Vallaldolid.
La adjudicación de este modelo lleva implícita una serie de medidas de ajuste en la planta palentina –que produce en exclusiva cuatro de las seis carrocerías del Mégane–, como el aumento de la bolsa de horas de flexibilidad o el traslado de parte de la plantilla a la fábrica de Valladolid.
Por su parte, la fábrica de Ford en Almussafes, en Valencia, acogerá a partir de 2014 la producción de los nuevos Mondeo, S-Max y Galaxy, una vez que la planta de Genk (Bélgica) donde se venían fabricando hasta ahora, cierre sus puertas. La factoría valenciana produce en la actualidad los modelos Kuga y C-Max y en septiembre iniciará la fabricación de los Tourneo Connect y Transit Connect.
