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El tercer SUV de la gama de Seat ya es una realidad. Se sitúa como el modelo más grande del fabricante de Martorell y puede configurarse con siete plazas. Junto al Arona y el Ateca, el Tarraco redondea la familia SUV de Seat.
Las medidas exteriores del Seat Tarraco son 4,73 m de largo, 1,84 m de ancho y 1,65 m de alto. Emplea la misma plataforma modular que el Tiguan, la conocida como MQB A-LWB.
La línea de diseño tiene un halo continuista con el resto de la gama de Seat, y aunque ha sido el encargado de estrenar una nueva parrilla frontal algo más afilada que la de sus hermanos pequeños, se reconoce de manera rápida como un coche de la firma española.
En la zaga, el Tarraco presenta unas líneas sencillas a la par que elegantes. El aspecto más destacado es la línea de luces LED que cruza todo el portón trasero y que une las dos ópticas.
Este Seat cuenta con una fila trasera desplazable, lo que es especialmente válido en el caso de que se configure con siete plazas. El maletero del Tarraco de cinco plazas es de 760 litros.
La cifra se reduce a los 700 litros si optamos por el de siete plazas, y si llevamos los siete asientos desplegados, el espacio se queda en unos destacables 230 litros. Son unas cifras que lo posicionan en lo alto del segmento.
El SUV de Seat se puede elegir con motorización gasolina y diésel. El motor 1.5 Eco TSI de 150 CV y el 2.0 Eco TSI de 190 CV son los que se pueden equipar en gasolina, y no existe la opción de optar por las mecánicas bi-fuel con GNC.
En el caso del diésel se oferta tan solo una única mecánica, el 2.0 TDI con potencias de 150 CV y 190 CV. Tanto en gasolina como en diésel se puede optar por equipar al coche con un cambio manual de seis velocidades o el cambio automático DSG de siete relaciones.
El SUV de Seat aprovecha el desarrollo del grupo VAG en cuanto a sistemas de infoentretenimiento y ayudas a la conducción, y puede estar equipado con todos ellos.
Los que más destacan son el Virtual Cockpit y la cámara de visión 360º. Mientras, en materia de seguridad, el vehículo consigue todas las estrellas posibles en las pruebas Euro NCAP.
El comportamiento del Tarraco es correcto. Se muestra cómodo en autopista, con una capacidad de filtrado de irregularidades muy destacable.
Enlaza curvas con soltura, y al ser un vehículo de grandes dimensiones, las inercias de la carrocería aparecen, aunque no son excesivas. A ritmos legales el confort de marcha es destacado. En cuanto a la mecánica, es preferible configurarlo con los motores más potentes de 190 CV.
