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La fábrica del grupo PSA en Villaverde (Madrid) ya ha iniciado la fabricación del nuevo Citroën C4 Cactus, un modelo que acaba de sufrir un importante cambio de imagen, y que se produce en España para su comercialización en 50 países de todo el mundo.
Según Citroën, para el ensamblaje de cada unidad se emplean cerca de 25 horas, recorriendo en el interior de la planta madrileña un total de 5,4 km desde que su carrocería se comienza a preparar hasta que sale de la zona de acabado.
La fábrica de Villaverde ha emprendido importantes cambios en su tecnología para poder fabricar este nuevo modelo, que incorpora como principal elemento novedoso un sistema de amortiguadores progresivos hidráulicos. Esta tecnología ofrece un efecto de “alfombra voladora”, que permite al vehículo mantener altos niveles de comodidad interior al filtrar todos los baches e imperfecciones del asfalto independientemente de su estado.
Según Óscar Fernández, director del Centro de Madrid de PSA, “la planta de Villaverde dispone de los más altos niveles de calidad para asegurar que cada unidad del C4 Cactus superará las expectativas de las personas y los estándares más exigentes. Cada uno de estos vehículos se somete a controles específicos de aspecto, realización geométrica, conformidad, estanqueidad, calidad y funcionalidad o pruebas en la pista de la planta de Villaverde para asegurar el funcionamiento de sus órganos mecánicos y su equipamiento funcional y de confort”.
De acuerdo con PSA, desde que la marca lanzase al mercado este exitoso modelo, han salido de las líneas de producción de la planta madrileña un total de 270.000 unidades. En la actualidad, se estima que salen de Villaverde cerca de 67.500 unidades destinadas a todo el mundo, aunque la compañía espera ser capaz de llegar a los 80.000 C4 Cactus producidos. Y eso a pesar de que la fábrica madrileña cuenta con una capacidad cercana a los 140.000 vehículos procesados al año gracias al uso de dos turnos.
