Peugeot ha presentado la imagen del nuevo 208, antes de su debut en el próximo Salón de Ginebra. Su llegada está prevista a los concesionarios en otoño de 2019, convirtiéndose en una de las grandes apuestas del fabricante para los próximos años.
Después de 7 años cosechando buenos datos de ventas, el 208 estrena generación con una imagen exterior totalmente renovada y la incorporación del ya famoso i-Cockpit en su interior.
Otra de sus grandes novedades es que el urbano contará con una versión 100% eléctrica, pero también estarán las opciones tradicionales, diésel y gasolina.
Concretamente, la gama de motores contará con un gasóleo 1.5 BlueHDi de 100 CV y, en gasolina, el 1.2 PureTech con potencias de 75 CV, 100 CV y 130 CV. Mientras, la gran novedad es la inclusión en la gama de una versión 100% eléctrica denominada e-208.
En el diseño exterior, desecha las líneas redondeadas de su antecesor y aparece con una estética más dinámica. Adopta la nueva línea de estilo de la marca y las ópticas, que con tecnología led, se asemejan a las garras de un león. El Peugeot e-208 tiene una calandra en el mismo color que la carrocería, el logotipo e-208 en la zaga y la letra «e» en las aletas traseras.
En el interior, el i-Cockpit incorpora en el 208 el volante de pequeño tamaño, la pantalla multimedia de 5″, 7″ o 10″ según el acabado, e incorpora conectividad con Android Auto y Apple CarPlay.
Los asistentes a la conducción son otra faceta que Peugeot no ha querido pasar por alto con la inclusión de distintos elementos como, por ejemplo, el control de crucero adaptativo con función Stop & Go en atascos.
El e-208 cuenta con un motor de 100 kW o 136 CV, y está asociado a una batería de 50 kWh. Anuncia una autonomía de 340 kilómetros y cuenta con la posibilidad de recargar a 100 kW. Esta potencia de carga permite lograr el 80% de autonomía en tan solo 30 minutos.
Con esta nueva generación, Peugeot entra a competir en el mercado urbano con un producto bien resuelto y que cuenta con numerosas versiones. La variante eléctrica le convierte en el primer coche cero emisiones del fabricante francés bajo la nueva homologación.