Por qué este Mercedes-Benz 300 SLR se ha convertido en el coche más caro de la historia

El Mercedes-Benz 300 SLR es, desde el pasado 5 de mayo, el coche más caro de la historia. Mercedes y RM Sotheby´s subastaron, en un acto privado en el museo de la marca en Sttutgart, una de las dos únicas unidades que la marca fabricó. Ambas unidades del 300 SLR Coupé datan de 1955. 

Solo pudieron acceder a la subasta ciertos coleccionistas previamente seleccionados. Finalmente, fue el coleccionista y tratante de vehículos británico Simon Kidston quien se llevó el gato al agua. Simon actuó en nombre de un comprador anónimo. Su puja se situó en unos impresionantes 135 millones de euros, superando con creces los registros del Ferrari 250 GTO (subastado por 48 millones de euros). 

Este modelo, del que solo existen dos unidades, está basado en los prototipos 300 SLR que participaron en el Mundial de resistencia en 1955. Sin embargo, en el conocido como ‘desastre de Le Mans’ en el que murieron 83 espectadores y resultaron heridos otros 180, Mercedes se retiró de la competición. De los nueve chasis que habían sido creados, Rudolf Uhlenhaut rescató dos. A partir de ellos creó las hoy conocidas unidades del 300 SLR Unhlenhaut Coupé. Están considerados como los coches más rápidos de aquella época, con un peso de 1.117 kg y una velocidad máxima de 290 km/h.

Subasta solidaria con la Mercedes-Benz Fund

Los fondos recaudados por este vehículo se destinarán al Mercedes Benz Fund, un programa de asistencia escolar. Según el sueco Ola Källenius, CEO de la marca alemana, pretende “alentar a una nueva generación […] a desarrollar nuevas tecnologías». «En particular, pensamos en aquellas que respaldan el objetivo de la descarbonización y la preservación de los recursos”. Cabe mencionar que el nuevo propietario ha accedido a que el coche, que apenas ha recorrido 6.000 km desde que fue fabricado,  se presente al público en determinadas ocasiones especiales.